AIRE FRESCO
SONIA CARRIEDO ARIASHacía tiempo que no sabía de él. Habían pasado muchos años, sobre todo para mí: rozaba la jubilación forzosa por falta de empleo, afectado por el crecimiento desmesurado de despachos en un lugar del que hacía tiempo quería huir.
Provocó el encuentro y, sin apenas presentación, me entregó su tarjeta de visita. Ni le miré. Ni interés tenía en promover mi despacho en el momento menos productivo de todos.
Desganado, reposé mis brazos en mi escritorio carente de papeles y miré hacia el horizonte. Desvié por segundos mi atención hacia esa tarjeta que aún pendía de mis dedos y que dictaba: JUAN LOPEZ, ABOGADO. Inmediatamente leí el reverso que encontré escrito: Hoy soy yo el que vengo a rescatarte. Llámame y emprendamos nuevos proyectos.
Mi pasante, un crío venido a mí, al negocio inclusivo y lleno de oportunidades que era antes. Se acordó del abogado que le dio su oportunidad.
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Aire fresco en el despacho. Eso siempre es bueno.
Suertísima.
Gracias. Tu relato es muy bueno.
Saludos,
Muy buen relato, que nos demuestra como la vida da muchas vueltas, y tanto se puede estar arriba como abajo.
Mi felicitación y mi voto.
Gracias por tu voto.
Sonia, nunca debemos olvidar a quién nos tendió su mano. Hay que ser agradecido. La vida da muchas vueltas…
Mucha suerte y te doy mi voto,
Besos apretados.
Eso desde luego. Gracias por tu voto.
» Es de bien nacido ser agradecido » como debe ser. Muy buen relato, Sonia.
Mi voto y un abrazo.
Así es Ana Isabel. Gracias por tu voto.
Un relato muy atinado y muy bien escrito. Enhorabuena y mi voto.
Gracias por el comentario y por tu voto.