LA LETRA Y EL ESPÍRITU
ÁNGEL SAIZ MORAMis padres me aconsejaban que sentase la cabeza, rebosante de fantasía. En su opinión, ya no tenía edad para que los cómics de superhéroes llenasen los estantes del dormitorio y parte de mis horas.
Esa afición me condujo a ofrecerme voluntario para probar una nueva vacuna. Anhelaba experimentar alguna mutación prodigiosa como efecto secundario, un atributo singular que pondría al servicio de la sociedad. Nada sucedió, claro, pero el baño de realidad fue decisivo para promover un cambio en mi vida.
Tengo los mismos sueños, solo han variado de color. Sé que nunca llevaré una capa verde o roja, pero sí una toga negra. En mi cuarto hay ahora manuales de Derecho Romano, Civil o Penal. Intercalar las queridas revistas de aventuras entre sus páginas no solo ayuda a su conservación, también mantiene viva la solidaridad y entrega sin límite que aplicaré en mi futuro oficio.
+24
Queremos saber tu opinión
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
En cierta medida, resulta hermoso imaginar a un abogado como un superhéroe, sobre todo si defienden causas con pena de muerte, que todavía existen en este mundo. Y tampoco viene mal no terminar de sentar la cabeza, para creer en lo imposible. Grandísimo relato, Ángel, evocador y emotivo. Enhorabuena, mi voto y un abrazo.
La realidad puede ser como una apisonadora, que todo lo aplana a su paso. Frente a ello, es saluble, como bien dices, no dejarse vencer por el fatalismo, conservar el espíritu de creer que se puede avanzar más allá de los límites. Solo un espíritu imaginativo y abierto, aunque se le pueda tildar también de ingenuo o inocente, puede hallar algún resquicio para lograr lo que no parecía posible, donde otros hubiesen tirado la toalla.
Mucha gracias, Nicolás.
Un abrazo
Me ha emocionado de verdad. Mi voto y abrazo,
Me alegra que te haya gustado esta pequeña historia que trata de conjugar fantasía y realidad. Gracias y un abrazo, Francisco José
Muy buena historia, Ángel. Muy poético conjugar la pasión del amante de los cómics intercalándolos entre los códigos y manuales legales . Con independencia del color del héroe de turno siempre se puede luchar por acercarse un poquito más a la utopía. Mi voto, suerte y un abrazo.
De Supermán, como de otros superhéroes, no envidiamos y/o admiramos solo sus supuestos superpoderes, lo que más nos importa es su compromiso de servir a la sociedad de la forma que mejor saben. Levantarse cada día para tratar de contribuir a un mundo mejor desde una profesión tiene su parte heroica. Un abogado dispone de mecanismos para ello, aunque carezca de la fuerza y agilidad de una araña.
Muchas gracias, Juan Manuel
Un abrazo
Como abogado, tu protagonista luchará por la justicia, pero nunca perderá de vista sus sueños…
Hermoso relato, Ángel. Te deseo muchísima suerte y te dejo mi voto.
Besos apretados.
Tener los pies en la tierra quizá no sea incompatible con creer que la justicia, y con ello un mundo mejor, se puede conseguir.
Muchas gracias, Pilar
Besos
Me ha gustado mucho tu relato. Esa imagen de la toga como la capa del héroe batallador de a pie es muy hermosa. Adelante con los sueños con los libros en ristre. Un abrazo y mi voto
Un abogado que aplica todo su esfuerzo y saber en una buena causa es un luchador a pie de calle, como bien dices, aunque no vuele o se encarame a las paredes. Los libros, de una forma o de otra, que no falten.
Muchas gracias, Jero
Un abrazo
Historia original que rinde tributo a los cómics que, de una manera u otra, han formado parte de nuestra vida. Ahi va mi voto.
Mucha suerte, Ángel.
Sin los cómics (aunque entonces los llamábamos tebeos), mi vida, al menos no habría sido igual de divertida, creativa y entretenida. Les debía, al menos, un pequeño homenaje.
Gracias, Juan Carlos.
Un abrazo
Has mezclado la fantasía de los cómics y la realidad de la justicia de una forma muy original.
Un relato estupendo , Ángel. Para él mi voto y para tí un abrazo.
Los superhéroes son los paladines de la justicia por excelencia; salvo por las formas, vestimenta incluida, más algún que otro superpoder, se puede decir que tienen bastante en común con los abogados. Al fin y al cabo, persiguen lo mismo.
Muchas gracias, Ana Isabel.
Otro abrazo para ti.
Bravo por ese superhéroe con capa negra, Angel!!
Y la mención a la nueva vacuna está de rabiosa actualidad también.
Me ha gustado mucho, una visión idealizada de la labor judicial.
Te deseo mucha suerte y te envío mi voto!
Un abrazo
Marta
Hay muchos tipos de héroes, con capa o sin ella, y sin necesidad de superpoderes. Tesón, trabajo e ilusión son instrumentos poderosos en cualquier oficio, también en los que sientan jurisprudencia y práctica colectiva.
Muchas gracias, Marta
Un abrazo
Nuestros trajes de superhéroe son togas y nuestras armas, el Derecho… Muy buen paralelismo realidad-ficción. Admiro la fantasía, así que te llevas mi enhorabuena y mi voto. Un saludo, Ángel.
Los principios y normas que tratan de regular la vida humana, en aras al bien colectivo, parecen algo muy concreto, pero nada debería estar exento de imaginación y, por ende, de fantasía, por eso nos gustan las historias, en especial si terminan bien.
Gracias, Javier. Un saludo
Un relato emotivo, Ángel, con héroes y capas de colores…. Y con baños de realidad que siempre nos ponen los pies en la tierra.
Enhorabuena y mucha suerte.
Un abrazo.
No nos queda más remedio que vivir apegados al terreno, aunque un poquito de fantasía y de ilusión en lo que hacemos lo hace todo más llevadero y sirve de motivación.
Muchas gracias, Almudena.
Un abrazo
Buen relato, mezcla de sueños y realidades, como la vida misma. Me recuerda a mi Fatman, de hace unos meses, que debía ser primo de tu héroe. Mi voto y mis respetos.
Si se trataba de un superhéroe capaz de enfrentarse a quienes infringen la ley, o la tergiversan en perjuicio de otros, seguro que se conocen.
Muchas gracias, Esteban.
Un abrazo
¡Qué sería de la realidad sin fantasía! Y del mundo de los microrrelatos sin ti.
Me encanta el superhéroe que llevas dentro.
Un abrazo, Ángel
Qué sería de las historias cortas e imaginativas, sin cierta autora con nombre de flor con la que siempre se disfruta.
Mil gracias, Margarita.
Un abrazo
Quiso ser Spiderman y llegó a superarlo. Porque desde su humildad lucha por los demás de forma solidaria. Y sin olvidar la fantasía, indispensable en nuestras vidas. Gran relato, Ángel.
Un abrazo.
El difícil equilibro de tener los pies en el suelo y no renunciar a las quimeras.
Muchas gracias, María.
Un abrazo
Algún día se pondrá de moda un superhéroe abogado.
Mi voto, querido Ángel.
Un abrazo.
Creo que Disney ha comprado Marvel, es posible que a algún creativo de la empresa se le ocurra, que cosas más raras w3 hacen. Además, un abogado daría mucho juego en ese papel.
Muchas gracias, Manuel.
Un abrazo
Muy buen relato, Ángel. Te dejo mi voto, ¡mucha suerte!
Me alegro que te guste, Pilar.
Muchas gracias y un abrazo
Muy buen relato, Ángel.
Tú protagonista demuestra que se puede ser un superhéroe sin necesidad de tener la capa de superman.
Mucha suerte.
Un abrazo enorme.
Hay muchos más héroes y superheroínas a nuestro alrededor de lo que creemos.
Muchas gracias, Javier.
Otro abrazo grande para ti