Carmen María Díaz Sánchez

Microrrelatos publicados

  • Arriba y Abajo

    Entré a visitarle a los calabozos del juzgado. Siempre me causa desazón y cierto escalofrío bajar las escaleras que conducen hasta ellos. Es un tramo en el que comienzan las paredes sucias, frías y un olor a humedad que penetra y se fija en el cerebro. Arriba, el ajetreo de las salas de vistas, la cafetería, propinas que caen en una cesta solitaria de la barra. Sonidos que se mezclan con conversaciones y risas...
    Abajo la privación de libertad y el silencio.
    Entro en la dependencia separada por el cristal de seguridad. Su cara refleja decepción, tristeza y rabia. El tatuaje de su mano está atravesado por unas venas que latían de forma rápida, mostrando intermitentemente la caducidad del mensaje escrito con dolor y sangre. Solo me gritó -!qué puñetas hago aquí una vez más! Me sacarás otra vez, no?.
    Enmudecí... las venas palpitantes tenían la respuesta.

    | Enero 2017
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 3