SALGO CON UNA ABOGADA
Ángel Herboso Martínez · LAREDO (CANTABRIA)Cuando desperté sentí el vacío en la cama; a los pies,en la mesa de estudio, una lámpara encendida contemplaba unos folios en blanco, esperando un recurso que no llega. Llegamos para la cena y ya comenzaron los síntomas: no me prestaba atención. Nos acostamos temprano. Sentí que hacía el amor por compromiso y cuando me dio la espalda descargó su contenida rabia contra la almohada: ¡Es inocente!…¡Es inocente!,susurró entre ahogados sollozos. Busco el sol entre las cortinas pero está nublado y me levanto tarde, la he encontrado en el huerto de la posada contemplando ensimismada una calabaza naranja. Comimos en silencio y eché una cabezadita al calor de la chimenea. Cuando desperté se había ido, con la calabaza, según me dijeron. LLamó el jueves, estaba contenta: -¡Cuántas ganas tengo de verte!…Siento haberte estropeado el puente,te recompensaré. ¡Te quiero!.