CLAVE DE SOL
Juan Carlos Ruiz de Azagra · ZARAGOZAAlli estaba una vez más, sentado en la mesa de siempre en aquel restaurante de la periferia. Saboreaba un Valsotillo Reserva de 2004, acompañado por el dulce crepitar de la chimenea. El camarero con gesto complaciente le hizo entrega de la Carta. Como siempre, en su interior, junto al menú de noche, un sobre lacrado con una clave de sol. Una nueva comisión por el último pleito. Esta vez Su Señoría entendió el significado del lacre: Alguien tocaba la música y él bailaba a su son. Arrojó el sobre al fuego con rabia, cual hoguera de las vanidades. Eso sí, antes introdujo su contenido en el bolsillo interior de la americana y paladeó nuevamente el exquisito caldo de la Ribera del Duero.