La ley de los sueños
ELENA BETHENCOURTCoge el trapo y, antes de limpiar el polvo de la mesa, escribe con el dedo: “Nadie me podrá discriminar”. Luego dibuja en el vaho de los cristales: “No más desigualdad”. Frota hasta dejarlos relucientes, se ve reflejada en ellos y se repite: “Sabes bien que eres la primera de la familia a la que se le da esta oportunidad”. Llena el cubo de agua y piensa: “Lucharé por mí y por las demás”. Sonríe. Coge la fregona y, con movimientos circulares, va trazando por los pasillos la frase: “No a la brecha salarial”.
Mientras baja fregando las escaleras del juzgado, sueña con el resultado positivo del examen de mañana y va recitando de memoria los temas de Derecho Laboral.
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Un relato precioso. Mucha suerte para tu opositora. Enhorabuena y mi voto
Gracias, Nicolás, sí, yo creo que pasará, tiene la lección muy bien aprendida. Abrazos.
Me ha encantado. Te dejo mi voto y mi felicitación.
Hola, Esther, gracias por leer y comentar. Ya me suena tu nombre, lo sabes, ¿verdad? :-)
Un abrazo.
Nunca es fácil labrarse un futuro. La carrera de Derecho es muy vocacional y requiere esfuerzo y dedicación, sean cuáles sean las circunstancias de cada individuo. Tu protagonista tiene en contra el hecho de poseer de menos tiempo libre para formarse, que otros compañeros cuya única ocupación es estudiar, pero, al contrario que ellos, ha desarrollado una fuerza y un amor propio que es un auténtico motor, el que le proporciona no resignarse a un presente que no le gusta, el aspirar a lo que parece que le está vedado.
Un gran personaje y un ejemplo a seguir.
Un abrazo grande, Elena
Gracias, Ángel, tus comentarios embellecen los textos. Un abrazo.
No he encontrado ningún código que recoja la ley de los sueños, pero existe. Es como la de la gravedad, pero aún más fuerte. Alguien soñó con volar y lo hizo, venciendo la ley de Newton. Alguien soñó con ser abogada y, seguro que sí, cambió la bata por una toga. Y quizás soñó con que alguien lo contara de un modo bello, exquisito. ese sueño también se ha cuymplido. Un voto para que la ley de los sueños no sea derogada.
Enhorabuena.
Gracias, Ángel, tu comentario es un microrrelato en sí mismo :-)
Los sueños son los que hacen realidades.
Un abrazo.
Encantador relato, lleno de optimismo en estos tiempos que no invitan a ello. Los sueños a veces se cumplen, y , en todo caso, hay que luchar por ellos.
Mi rendida admiración y su voto merecido.
Gracias, Francisco, es cierto, hay que luchar por lo que queremos y disfrutar del camino.
Un abrazo