Triste déjà vu
sebastian barranco ledoEl agente, emocionado, inicia su discurso. Es su último día de servicio, tras toda una vida en la policía judicial. Saluda agradecido, intercala chistes sobre el joven e inexperto sustituto al que más que instruir, ha tenido que adoptar, y propone un brindis.
Le interrumpe una llamada de emergencias: crimen en un despacho de abogados en Usera. Acudir de inmediato para iniciar diligencias.
En el lugar de los hechos, la panorámica es terrible. Le invade una extraña sensación. Como si hubiese estado allí antes. Como contemplar un eclipse sangriento, repetirse cada 39 años.
Su memoria conserva esa sensación, asociada a un documento gráfico en blanco y negro. Nada más.
Horas después, cuando el juez procede al levantamiento, se le aclaran los recuerdos. Él era el joven e inexperto sustituto que acudió en su primer día de servicio, allá por enero de 1977, al despacho de abogados en la calle Atocha.
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Memorable la figura de don Antonio Pedrol, togado, encabezando el cortejo fúnebre. El P.C. aún no había sido legalizado y nuestro decano no compartía la ideología de los letrados asesinados, pero don Antonio supo estar a la altura de las circunstancias como nadie. Ante todo, eran compañeros.
Suerte, Sebastián.
hola, muchas gracias
todo asesinato es condenable, verdad, al margen de ideología, pero como señalas, los compañeros asesinados en un bufete, sea hace mil años en atocha o en usera ayer mismo, merecen un homenaje, y este espacio es tan bueno como cualquier otro.
un saludo
Emocionante, y mucho tu micro. Felicidades, Sebastián.
en 150 palabras, emocionar es el objetivo asi que lo tomo como el mejor de los cumplidos
gracias Towanda!
Buen relato, Sebastián. Mucha suerte
muy agradecido por tu comentario, Francisco
Bonito homenaje a aquellos abogados.
Salu22.
muchas gracias María Teresa
Buen estilo, limpio, cuidado. No me gusta el tema tratado, pero ninguna objección a tu forma de escribir.
Hola Chema, en efecto, no es un tema que guste, cabalmente; pero gracias por el cumplido.