Vocación
Ernesto Ortega garrido Con tres años, ya aporreaba la mesa del salón con un martillo de juguete, intentando poner orden en la “casa”. Me pasé la infancia jugando a los abogados. Acusaba al cactus de haberme pinchado un globo, a los caramelos de provocar caries, a un calcetín desparejado de abandono familiar. Los llamaba a declarar y me pasaba las horas inventándome testimonios que aludían al derecho consuetudinario y a términos que no sabía siquiera qué significaban, ante la desaprobación de mis padres que querían que dejase cuanto antes todas esas tonterías. Desde pequeño soñaba con representar a los más desfavorecidos, pero me vi presionado a seguir la tradición familiar y, como hijo único, no me atreví a decepcionarlos. Ellos siempre vienen a verme al teatro. Al acabar cada sesión, se levantan de sus butacas y orgullosos comienzan a aplaudir. Mientras tanto, entre actuación y actuación, he empezado a estudiar derecho.
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El derecho, como la vida, es puro teatro. Una perspectiva interesante, Ernesto. Enhorabuena. Mi voto y mucha suerte.
Ernesto, una gran alegría encontrarte por aquí. Me ha encantado tu relato.
Te deseo mucha suerte.
Un abrazo.
Vocación y Tradición son sin duda una buena suma para triunfar. Seguro que será un buen gestor de la justicio y el orden. Mi voto y un saludo.
Buena historia y muy bien contada. Mi voto y suerte, Ernesto.
Ernesto, excelente relato. Has sabido muy bien darle la vuelta a la tradición y a la devoción.
Te deseo mucha suerte y te dejo mi voto.
Besos apretados.
Como el derecho se te dé igual de bien que escribir, te contratan en Ally McBeal. Fijo.
Al final siempre gana la vocación, y eso se puede aplicar a todo en la vida.
Un abrazo y mucha suerte, Ernesto.
También estudiaba derecho -erguido- los papeles. El gran teatro del mundo, que diría Calderón. El pequeño teatro jurídico y, a veces, el guiñol jurídico, como podemos verificar a diario.
Suerte, Ernesto.
The Horological Society of New York wants to help watchmaking students succeed in every way, said Edwin M. Hydeman, Executive Director of HSNY. «The Henry B. Fried Scholarship was designed to ensure future link generations of watchmakers.»