Confinado
Laura SoteloLlevo cinco días dando vueltas en esta habitación como un alma en pena. Hasta los langostinos me los he comido con la única compañía de los pájaros, que desde el marco de la ventana, me observaban con curiosidad.
El despacho cerrado, los juicios suspendidos, y el teléfono que no para de sonar. Incluso la anciana que sale a regar sus plantas me mira con lástima.
-¿ El bicho?- me preguntó ayer desde su balcón. Yo asentí con la cabeza y ella, sonriendo, remató – Que injusto, que le hayan encerrado sin cometer ningún delito ¿Verdad?-
Después de aquellas palabras no puedo dejar de pensar si, en mis veinte años de ejercicio, habré metido en la cárcel a algún inocente…
+31
Queremos saber tu opinión
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
Jo, que bueno !!!
Un final interesante, contundente y poco esperado. Un buen microrrelato. No como otros de los que publican, que más parecen ñoñerías que microrrelatos.
Mucha suerte. Ojalá el jurado sepa apreciar la calidad de tu relato (roguemos al señor, o a la señora, que tanto da).
Cada uno tiene su punto fuerte, al final dar con el gusto de todos es complicado jajaja. Muchas gracias por tu comentario, ¡saludos!
Da mucho de sí el bicho, sobre todo, tiempo para pensar.
Contundente.
Un saludo, Laura
Sí que da para pensar sí… Ahora me pillas de encerrona con el bicho.
Muchas gracias Margarita!!
Que vaya todo bien.
Contundente y de actualidad. Aprovechar el tiempo libre para reflexionar. Enhorabuena
Exacto, ahora mismo estamos muchas con tiempo libre, por desgracia… ¡Muchas gracias!
Un buen relato para pensar. Mi voto, enhorabuena.
Muy amable, ¡muchas gracias por tu voto! Un saludo.
Qué buen micro!! Para pensar…
Suerte, un voto y un abrazo.
Al final, vamos a pensar que el mundo se ha dado la vuelta y la cárcel es el mundo exterior.
Suerte en el concurso y en la lucha contra el bicho, la bicha o lo que sea el corona, que no está claro a qué mundo pertenecen los virus.
Saludos Laura, el tuyo es un relato escrito con mucho talento y pocas palabras. Saludos.
Qué sencillo haces lo que es complicado, contar bien la historia en pocas palabras. Pienso en el sentimiento de soledad que es el estar confinado y, respecto de la última frase, en la responsabilidad que tenemos los abogados de influir en la justicia, con nuestro quehacer. En definitiva, coincido con los demás en que se trata de un relato que da mucho que pensar. Felicidades, mi voto y un saludo.