ANTES DORMÍA MEJOR
Aurora Roger Torlá Dormía mejor cuando solo era abogado.
Ahora salgo en los telediarios como juez de un caso mediático. Con cámaras de televisión en la sala y retransmisiones en directo, el proceso es muy comentado, como sucede con algunos partidos de fútbol trascendentes.
En la soledad de mi biblioteca, paso horas con la lupa revisando documentos.
Tengo despistes, algún olvido y lapsus línguae. En la sala pronuncié frases cómicas que repiten como ecos en programas de humor.
Me falla la memoria. Pero encontré un remedio. Si me siento intimidado, miro fijamente el vistoso collar que luce, sobre mi toga, junto a la Gran Cruz de la Orden de San Raimundo de Peñafort. Me infunde confianza, sosiego, seguridad, y así las palabras fluyen con naturalidad y precisión, sin tartamudeos ni silencios prolongados. Es un privilegio haber recibido una condecoración que reconoce mi dedicación como jurista. Es mi ansiolítico, sin efectos secundarios.
+31
Queremos saber tu opinión
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.


«Es mi ansiolítico, sin efectos secundarios», muy bueno, tienes mi voto
Saludos!
Muchas gracias, Cristina.
Oris is approaching the 60th anniversary of one of its most iconic and core releases—the Divers Sixty-Five—and it’s doing it by making some subtle updates and rebranding as the Oris Divers Date. If you know the Divers Sixty-Five, link then you will feel right at home with the new watch.
Today, enthusiasts debate the real purpose of wearing watches. Beyond displaying the time, link serving as fashion accessories or social statements, or giving us the pleasure of operating fine mechanical instruments, watches connect us with people or things that we enjoy, perhaps our heroes or our history. Watches can also provide a sense of escape, from the here and now to a memorable era.