Calamidades
Miguel Ángel Arana Martínez Los ojos amables de mi abuela me miraron cuando entré en la cocina.
«Hola, cariño. ¿Qué tal en el cole?»
«Hoy nos han hablado de las profesiones».
«¡Qué interesante! ¿Qué os han contado?»
«Pues… no sé. Algo de que tenemos que seguir nuestra vocación y gestionar nuestros intereses… La verdad es que no me he enterado de mucho.»
Ella levantó la ceja con aire de reproche.
«Eres una calamidad, como tu padre. ¿No te digo siempre que hay que prestar atención a las cosas?»
«Es que me aburría. Al final, nos dieron un papel con unas preguntas, y según las respuestas daba un oficio.»
«¿Ah, sí? ¿Y a ti qué te ha salido?»
«Abogado».
Mi abuela suspiró, se levantó de la mesa y se puso a fregar los platos mientras murmuraba algo entre dientes. Sólo entendí una frase.
«Una calamidad, como su padre».
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Un relato muy divertido y muy ajustado a la realidad. Enhorabuena, mi voto, y mucha suerte.
Ja ja, muy divertido y original, Miguel Ángel! Mi voto y suerte.
Te felicito. Muy buen relato. Mi voto y suerte.
There’s something about the brutish squared-off design that’s even more reminiscent of functional design than the svelte curves of the ’60s and ’70s. Take the Sub600T pictured here, for example. The 14mm thick case seems like it could survive the blast of a SCUD missile. The crystal is mineral at a link time when many dive watches were still using acrylic.