Traición
Javier López Vaquero El ilustre abogado don Eutimio Alonso, a la sazón mi padre, repetía como una letanía: «Nunca desdeñes a un potencial cliente» Retumbaban en mi cabeza estas palabras cuando vi entrar en mi despacho a un individuo extraño, misterioso. Tenía una sola ceja y portaba una bolsa de plástico.
Me entregó un papel. «Ahí tiene la fecha de mi muerte y el nombre de mi asesino. Tiene que gestionar la justicia. No me falle» Me entregó la bolsa llena de billetes y desapareció.
Pasado el tiempo, una noticia en el periódico llamó mi atención. Habían asesinado a mi cliente.
El caprichoso y enredador destino, condujo al presunto asesino a mi despacho. Hombre educado, amable, cuyo dinero me haría olvidar las preocupaciones para siempre.
Llevé su defensa y lo absolvieron.
Ahora soy rico, sin preocupaciones… Bueno salvo una: En mi cocina habita el fantasma de aquel extraño reclamando justicia con insistencia.
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Scolnik researched without luck. All he heard was a potentially apocryphal story of watches of various link complications, maybe five or six, made for some kind of exhibition. One thing became clear. This particular watch fell in the serial number range of watches made by C.H. Meylan.