Educación
Marta Trutxuelo GarcíaLa veo refunfuñar delante del libro. «¿Puedo encender el ordenador?», pregunta por enésima vez. «Termina esta página. Mira… ¡he descubierto un sistema innovador para aprender a leer!». Y digo impostando la voz: «La «m» con la «a»…». «¡Mamáaaa!, ¡que ya séeee!», protesta ella. Desde la experiencia y sabiduría que le otorgan sus seis años de edad, mi hija expone la situación de su colegio: la niña del pañuelo, Yashia, aún no sabe leer; tampoco Luismi, el vecino, porque durante el confinamiento no se conectaba a las clases online…
«¿Por qué estudias, mami? ¡Ya eres mayor!», pregunta al verme retomar mis apuntes. Aunque es pequeña le explico el valor del aprendizaje y conceptos como equidad, inclusión… Sonrío. Pienso en mis oposiciones a jurista de prisiones, pienso en los reclusos, acaso con hijos llamados Yashia o Luismi, pienso en mi hija y recuerdo que la educación es un derecho, no un privilegio.
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Totalmente de acuerdo.
Saber leer y poder hacerlo es una suerte de la que no somos muy conscientes. Incluso elegir no leer.
Una chulada de relato, Marta.
Mucha suerte y un abrazo.
Mil gracias, Margarita!
Un abrazoo!
Marta
Brillante relato, Marta, con un mensaje tan contundente como necesario, para que no olvidemos nuestros privilegios. Mucha suerte, eres nuestra esperanza, un abrazo.
Muchísimas gracias, Nicolás!!!
Privilegio también, recibir tus comentarios mes a mes, espero que pronto sea recíproco, compañero!!!
Un gran abrazo esperanzador!
Marta
Marta, como siempre muy brillante a la hora de escoger los representantes de colectivos que, sin nombrarlos, personifican las desigualdades que retratas y denuncias. Un veso y un boto, o al revés.
ja, jaaa… gracias Esteban!!! Me ha gustado ese final disléxico!!!
Un abrazo para ti también!!!
Marta
Un relato emotivo. Me encantan las motivaciones por las que alguien se agarra un libro: como un canto de libertad, o una tabla de salvación, o el modo de ayudar, o la forma de poder decir: no, gracias.
¡Suerte Marta!
Gracias, Ángeeel!!!
Sigue agarrándote a tu imaginación y buen hacer literario para sorprendernos con tus historias, siempre motivadoras.
Siempre nos quedará… octubre!
Un abrazooo
Marta
Buen relato, tienes mi voto.
Gracias, Carolina!
Un abrazo!
Marta
Hola, Marta!!!
Un relato pedagógico por doble vertiente. Además de atrayente y emotivo.
Y con una narrativa de profesional!!!
Pues por eso: mi voto y mi abrazo :)
Mil gracias, Amparooo!!!
Otro abrazo para ti!
Marta
Martaaaaaaaa suerte para tu relato y para esa futura jurista, que me siento muy identificada con su sufrimiento, jaja. Besazos para el norte.
Evaaaa… mil gracias, amigaaa!!!
Efectivamente me acordé de ti al intentar definir a esa abogada, trabajadora, madre y estudiante, una mujer todo terreno, como una que me sé yo, je, jeeee!!!
Espero que sigas disfrutando de lo que queda de verano y ya sabes donde nos podemos encontrar siempre.
Un abrazo fresquito desde el norteee!!!
Tu amiga, Marta
Mi voto, Marta, a tu historia. Muy bien contada e ilustradora. ¡¡Enhorabuena!!
Muchas gracias, Juan Manuel!!!
Un abrazo
Marta
Hola, queridísima.
Me parece que el mensaje de tu micro debiera ser lema mundial o interplanetario incluso.
Suerte, que te la mereces como la gran escritora que eres, lo constante, lo amable, simpática, generosa, reguapa, salada, etc.
Un abrazo enorrrme.
Towi, amigaaa!!!
Mil gracias por tus palabras, comparto el mensaje, cómo no, contigo!!!
Y gracias por tu incondicional apoyo, motivación y amistad, reinaaaa!!!
Otro abrazo más (si cabe) grande!!!
Marta