Manuel Rodríguez Antón
Microrrelatos publicados
Abrazos de oficio
Nos llaman y acudimos al rescate. Como esos superhéroes de cómic. No importa que sea feria. El mar no descansa y nosotros tampoco cuando hacemos guardia. Venimos a relevar el miedo. De los que todavía están y no quieren regresar al infierno. Reviso el acta de la policía: ocho supervivientes. Entre ellos, una embarazada y un menor. Salieron cincuenta desde Argelia. Algunos cuerpos han llegado con ellos a tierra. Tarde, porque lo hicieron privados ya de vida. Otros, ni eso; el Mediterráneo los engulló antes. Uno de los supervivientes me examina. -Abogado-, me pregunta sin ser muy consciente de lo que eso significa para él. Es lo poco que conoce de un idioma extraño. Asiento. Me abraza con fuerza y llora. Como si mi confirmación le permitiera aferrarse también al mundo. Ahora nos queda otra dura travesía, pienso. Una en la que no dejaré que su barco vuelva a hundirse.
| Agosto 2024
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 17El Doctor Jiménez
No tenía formación, ni título académico alguno. Tampoco una tesis. No recitaba artículos de memoria ni utilizaba términos rimbombantes, y, para razonar sus respuestas, huía de argumentos manidos y recurría al sentido común. De ahí que no había en el pueblo un solo vecino que no hubiera acudido a él para obtener su confesión. Lindes o herencias, daba igual. Era, sin quererlo, experto en todas las ramas del Derecho y era, también sin saberlo, un destacado exponente del iusnaturalismo. Para emitir su parecer le bastaba con aplicar una máxima: “Alejarse de la norma y acercarse a la naturaleza”, porque la ley de los hombres no es siempre justa, decía. Por eso, cuando la pasada primavera falleció, a la plaza del Molino la nombraron, en su honor, plaza del Doctor Jiménez. No por lo mucho que sabía de Derecho, sino por todas las heridas que había curado aplicando la ley natural.
| Abril 2024
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 5Tú, mi padre
Milimétrico, vehemente, incansable. De él aprendí que en la vida y el Derecho no hay nada absoluto, que hay pactos más placenteros que victorias y que hay que saber cuándo formular protesta y cuándo guardar silencio. También de él fue mi primera toga y mis primeros códigos. Pequeño y peludo (por la barba) como Platero, pasó más tiempo en los juzgados que en casa. Las mangas de la toga siempre largas y la camisa sin corbata, me enseñó que sin pasión no se puede ejercer y que no hay retorno posible de una profesión que la amas tanto como te mata. Ahora, conectado al respirador, tan tranquilo y mudo que no parece él, nos recuerdo atravesando aquellos montes de lavanda y jara, cuando yo todavía era un niño y él me decía que “los juicios se pueden ganar o perder, pero hay que lucharlos siempre. Como la vida, hijo”.
| Septiembre 2023
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 15Un minuto
Un minuto. Es el tiempo que tengo ante este Tribunal de atrezo, en el que nadie gana un litigio. No hay en la sala una mueca afable ni un gesto humano. Todos sabemos que estoy sentenciado, que ya no existo. Tampoco, el término justicia. He renunciado a la defensa, antes de preso era abogado y solo me he acogido a mi última palabra.
Un minuto: recuerdo las historias de mi abuelo sobre una guerra que se repite y en la que ahora yo soy el vencido. También, lo ocurrido tras las últimas elecciones donde nadie pudo pactar con nadie: los titulares incendiarios; las acusaciones de pucherazo; el golpe; las vacaciones interrumpidas y el exilio de los míos...Nos maldigo, por olvidarnos de la fragilidad de la Historia y de la levedad de la memoria de los hombres. Pero no diga nada.
Un minuto: de silencio. Que guardo por todos.
| Junio 2023
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 10El mundo que viene
3 de mayo de 2023, 18.55 horas, Centro de convenciones de Port Aventura (Tarragona): cinco minutos para el evento del año. Antes de salir recuerdo orgulloso la comunicación que recibí del Consejo General hace unos meses y con la que otros colegas solo pueden soñar. “Enhorabuena: ha sido Ud. elegido para participar como ponente en el acto de apertura del XIII Congreso de la Abogacía Española. Objetivo: fomentar la cultura del acuerdo y debatir de manera conjunta sobre el futuro de la profesión”. Más de 2.000 asistentes y un público potencial de 150.000 abogados, la gran cita de la profesión, los Óscar del Derecho. Me sudan las manos, pero enseguida escucho mi nombre, mi trayectoria y mis logros académicos, y me relajo. Desde la tarima reconozco a magistrados, catedráticos, compañeros, etc. Les devuelvo el saludo.
-Queridos amigues…, carraspeo, dando comienzo al discurso que me ha preparado ChatGPT-.
| Mayo 2023
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 7La última palabra
Abogo por la belleza de la palabra,
porque con ella se construye y destruye todo, hasta los argumentos más sólidos.
Hablar con pausa y escuchar atentos.
Por desnudarnos en el estrado como en la vida y dar toda la protección al cliente,
peleando cada instante suyo como si fuera nuestro.
Abogo por volver a luchar por lo justo y no solo lo legal establecido.
por gestar defensas que son disparates y enarbolar causas perdidas de antemano.
Por recordarnos, sin dudar un segundo, que la inteligencia artificial nunca podrá suplantarnos porque nunca podrá crear arte y nosotros, además, también somos magos.
Abogo por gritar, muy alto, que no somos esclavos, de nadie, y que nos deben tiempo
para vivir la primavera que perdimos.
Así que permitidnos viajar, hacia un mundo transversal aun no inventado y recuperar el prestigio que nos robaron.| Abril 2023
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 5Tabús mentales
No hay reforma legal que nos libere de esta cláusula abusiva vitalicia. Es esa clase de vida, con víctimas por todas partes: hace un año que Paula perdió la custodia compartida por incompatibilidad de horarios, y, ayer, fue Jaime quién renunció por ansiedad, cansado de la competitividad y barbarie del mundo de la abogacía. El verano anterior otro compañero del despacho se desplomó al finalizar su tercer juicio del día. Hoy, después de seis meses de baja, por fin he vuelto a ponerme la toga, la capa de Batman como la llama mi hijo, pero al subir al estrado no me he sentido especial como antes de mis ataques de pánico. Apenas he sentido nada. Efectos secundarios del Diazepam, supongo.
| Octubre 2022
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 132050
La última ola de calor, que duró tres inviernos, lo arrasó todo. Ahora, frente al cráter Jezero, observo a alguien programar el oxígeno de su escafandra y recuerdo la última defensa de mi manifiesto ecológico ante la Corte Internacional de Cambio Climático. También, la actitud distante del Tribunal cuando les entregué el artículo de denuncia de una compañera envenenada que auguraba la extinción de la especie humana para mitad de siglo. Además de los abogados, solo sobrevivimos las cucarachas.
| Agosto 2022
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 2Con la venia de
“Ayer morí. Junto al umbral de la puerta de mi casa. Después de dieciocho cuchilladas. A plena luz del día y por la espalda. Me desangré, en silencio, frente a las lágrimas de mi hija pequeña que intentó proteger mi cuerpo de los golpes de su padre con su mochila de la escuela. La dejo atrás, igual que el primer tortazo inesperado y la colección de direcciones de las casas de acogida. Me quito el peso de la memoria, las miradas indiscretas de los vecinos, y el olor a Betadine de la piel; y le susurro al oído que la quiero, y le deseo un futuro agradable junto a alguien que sepa lo que es querer, aunque tengo miedo de que crezca y me recuerde solo como a una víctima. La 52”.
Lo digo ahora yo, su abogada, ante este Tribunal, como última alegación, porque mi cliente ya no puede.
| Julio 2022
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 12