The End
Ignacio Buzon Novo · OviedoLa diligencia había encallado en mitad del riachuelo. No era un buen sitio a juzgar por la bala que le había volado el sombrero al cochero. Los siux de un lado con sus plumas y sus flechas, el séptimo de caballería del otro de un azul polvoriento. Fuego cruzado sobre unos novios que se abrazaban dentro del carromato temerosos de no salir con vida. Su boda pendía de un hilo, al igual que pendía de un hilo la vida de Dakota, descendiente del gran jefe indio Seattle, y ahora camarera por turnos en el casino Foxwoods de Connecticut. Se la acusa de asesinato con arma blanca: una flecha. Su abogado apaga la tele, sabe como acabará la historia aún sin verla, igual que sabe cuál será el destino de su cliente antes de entrar en la sala. Ya ha visto antes esa pelicula. Es la ley del Oeste. The End.