Traspié
laura pilato rodríguezEl pronunciamiento del juez fue decepcionante: – La demanda se desestima por falta de pruebas- . Pero una abogada tenaz, como mi madre, no se rinde tan fácilmente.
Algo estaba pasando en el asilo, y además del abuelo, podría haber otros ancianos afectados. Moretones injustificados, continuas fracturas con la excusa de resbalones en un día lluvioso, mirada timorata en presencia de los cuidadores… Él guardaba silencio, así que ella iba a averiguar lo que estaba ocurriendo.
Se tuvo que inscribir como voluntaria de acompañamiento, pidió vacaciones en el despacho, y se camufló bajo una peluca, unas enormes gafas y un llamativo vestido de flores. Estaba irreconocible, pero aquella ridícula indumentaria no mermaba su coraje.
Se encaminó hacia el asilo diciendo – Si el juez quiere pruebas, las tendrá.
Y allí descubrió las nefastas consecuencias de las clases de Zumba para la osamenta de un octogenario.
+27
Queremos saber tu opinión
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
Cuando ya me temía un final horrible, zas, giro de muñeca y cambio a tono divertido. Muy buena idea Laura, enhorabuena y suerte.
Muchas gracias, Ana María! Se nota que lo mío son los finales inesperados…jajaja.
A veces las apariencias engañan, pero no hay como estar metido en el meollo del asunto para conocer todas las circunstancias, para que la verdad aflore, que no es otra que la conclusión de que una partidita de parchís es más recomendable que una clase de Zumba a ciertas edades. Bien por esta abogada valiente y decidida; bien también por este relato con inesperado vuelco final que todo lo cambia y deja una sonrisa.
Un saludo y suerte, Laura
Mil gracias Ángel, me alegra que el relato te sacara una sonrisa!
No solo el Zumba, yo probé la Bachata y no te quiero contar como terminé.
Suerte, y mi voto
Y no hablemos de spinning…jajaja gracias por tu voto!
¡Qué buen giro final!
Se agradece terminar la lectura con una carcajada. Y ya tengo claro lo que no tengo que hacer: nada de zumba (ni de pensar mal).
Saludos, Laura.
Muchísimas gracias Margarita! Un abrazo!
Un traspiés literal y metafórico, de apreciación. Afortunadamente, claro. Enhorabuena. Mi voto y un abrazo!!
Un abrazo y muchas gracias, Juan Manuel!
Buen final, Laura. Me estaba temiendo lo peor.
Mucha suerte y un voto para tu historia.
Besos.
Gracias por el voto, un besito!
Que historia tan amena. Suerte con ella.
Muchísimas gracias, María!
Cuántas veces al empezar a ejercer nuestra profesión, nos hemos puesto el traje de faena de detective privado yendo en persona a comprobar con nuestros propios ojos la verdad. No tengo por más que felicitarte por un buen micro y con un final tan divertido como contrapunto al dramatismo de su planteamiento. Mucha suerte, Laura. Un saludo.
Gracias Javier, un saludo!
Muy hábil esa detective. Felicidades.
Gracias María!!
Sigo votando solo los tres micros que más me gustan. Uno de esos votos es para el tuyo y creo que lo merece, entre otras cualidades literarias, por el sorprendente final. Mucha suerte.
Oh, muchas gracias, es todo un honor estar entre tus finalistas! Un saludo!
☺️ me gusta mucho el final.
Muchas gracias!!
El abuelo… estaba de parranda.
Muy bueno, Laura.
Mi voto.